El iceberg empezó a moverse luego de estar encallado. Millones de especies están en riesgo.
Un gigante de 4 mil kilómetros cuadrados (tres veces el tamaño de la ciudad de Nueva York) permaneció en el fondo del océano Antártico durante cerca de 30 años y emergió por razones indeterminadas. Se trata del iceberg A23a, el más grande del mundo, que se mueve hacia el océano Atlántico.
El Instituto de Investigación Polar del Reino Unido (British Antarctic Survey), informó que el gigantesco iceberg estuvo encallado en el fondo del océano por más de tres décadas y ahora está en movimiento.
El A23a, según El Espectador, se separó de la costa antártica en 1986, pero se asentó en el mar de Wedell pasando a ser una isla de hielo.
Del extraño fenómeno dieron cuenta imágenes satélites, las cuales muestran como el iceberg comenzó, desde hace unos meses, a moverse rápidamente y ahora está a punto de traspasar las aguas antárticas.
¿Por qué comenzó a moverse?
Antártida.
Foto:
iStock
El experto Andrew Fleming, de la British Antarctic Survey, le dijo a la BBC que él mismo preguntó a un par de colegas si pudo haber algún cambio de temperatura en las aguas que lo hubiesen provocado “pero el consenso fue que simplemente había llegado el momento”.
(Le recomendamos: ¿Qué tanto se sabe sobre la amenaza de los satélites en el espacio? Le contamos)
Estaba encallado desde 1986, pero con el tiempo iba a perder tamaño de manera suficiente como para perder agarre y empezar a moverse.
Según el glaciólogo, el A23a «estaba encallado desde 1986, pero con el tiempo iba a perder tamaño de manera suficiente como para perder agarre y empezar a moverse. Detectamos el primer movimiento en 2020″.
Además de esa razón, el experto señaló que en los últimos meses, el iceberg ha sido empujado por los vientos y las corrientes y ahora está pasando por la punta norte de la Península Antártica.
«Como la mayoría de icebergs del sector de Weddll, el A23a será casi con toda seguridad expulsado a la Corriente Antártica Circumpolar, que lo arrojará hacia el Atlántico Sur en un camino que se ha convertido en una especie de “callejón del iceberg”, explicó Fleming.
Qué consecuencias traerá el fenómeno?
Millones de focas, pingüinos y otras aves marinas que habitan el sur de Georgia serán afectados si el iceberg encalla en esta isla. Su gran tamaño alteraría a estas especies.
Aunque hacen parte de diferentes especies, los pingüinos papúa y los pingüinos barbijo no parecen tener problema para compartir la misma playa mientras toman el sol o saltan al agua.
Foto:
EL TIEMPO- Fotos tomadas con el Huawei Mate 50 Pro
“Un iceberg de esta escala tiene el potencial de sobrevivir durante bastante tiempo en el océano Antártico, a pesar de que es mucho más cálido, y podría abrirse camino más al norte, hacia Sudáfrica, donde puede perturbar el transporte marítimo”, afirmó el glaciólogo del British Antarctic Survey, Oliver Marsh.
