Existen muchos productos para ahuyentar a los roedores, pero ¿qué tan efectivos son en realidad?

Los roedores suelen ser un dolor de cabeza en los hogares, debido a que ratones o ratas pueden provocar alergias, propagar enfermedades como el hantavirus, y además causan problemas técnicos como roer la madera y los cables eléctricos. De modo que hay muchos métodos para deshacerse de estos intrusos, entre los repelentes naturales, químicos y trampas.

Los repelentes caseros de ratones como hierbabuena, bolas de naftalina o aparatos de ultrasonidos, en su mayoría, no funcionan. Aunque contribuyen a reducir el número de roedores, no acaban con ellos por completo. Los roedores son muy inteligentes, por eso cuando encuentran un lugar a salvo de depredadores, no lo van a abandonar fácilmente.

¿Sirve usar bolas de naftalina?

Este químico redondo y blanco tiene un olor muy fuerte, tiene la particularidad de que cuando es inhalado o ingerido, puede provocar que las células pierdan la capacidad de oxigenarse. Por esta razón, los roedores reconocen la naftalina como algo peligroso y huyen de los lugares donde son ubicadas las bolitas.Para deshacerse de los ratones en la casa, el cloro puede ser de gran utilidad. | Foto: Getty Images

Se cree que colocando las bolas de naftalina cerca de un nido de roedores se puede acabar con ellos, pero esto no es del todo efectivo. Puesto que la dosis necesaria para ahuyentar roedores es la misma que se necesitaría para los humanos, y las bolas de naftalina tienen muy poco impacto. Se han visto casos en los que los roedores simplemente han pasado por encima de las bolas de naftalina, como si nada.

Además, las ratas y los ratones son criaturas astutas. De hecho, si les molesta el olor de las bolas de naftalina cerca de su nido, simplemente construirán otro en la misma casa, causando más daños en la estructura.

¿Sirve el aceite de hierbabuena para ahuyentar ratones?

Aunque la casa quedará oliendo muy bien, los ratones seguirán allí. La hierbabuena, como en el caso de la naftalina, solo puede tener efectividad en grandes cantidades, cuando tienen un olor muy fuerte, pero también afectaría a los seres humanos. Además, las ratas y los ratones pueden vivir en desagües, entre olores nauseabundos, por lo que no es demasiado grave para ellos el olor de hierbabuena.El aceite de hierbabuena puede ayudar, pero tiene contundencia para repeler a los roedores. | Foto: Getty Images

Puesto que el aroma del aceite de hierbabuena, como tal, se eleva y evapora, no llega con fuerza a los roedores, que viven a nivel del suelo.

¿Son efectivos los repelentes de ultrasonido?

Los dispositivos de ultrasonido pueden ahuyentar a los roedores durante un tiempo, una de las causas de que no funcionen es que necesitan estar siempre enchufados, por lo tanto, no funcionarán en zonas de la casa donde no suelen encontrarse enchufes, como los patios y jardines. Además, la onda puede disminuir por las paredes.

Y como en los dos casos anteriores, el ultrasonido necesario para acabar con los roedores debe ser muy alto, con lo que acabaría perjudicando también a personas y mascotas.

¿Entonces cómo repeler a los roedores?

Ante la ineficacia de los métodos más comunes, los expertos recomiendan optar por prevenir su aparición, controlando las causas que atraen o permiten que haya roedores en una casa. Si es demasiado tarde y ya tiene ratones, lo mejor es contactar con una empresa de control de plagas profesional. Luego, tenga en cuenta estas recomendaciones para evitar que vuelvan a entrar.

Reparar cualquier desperfecto exterior e interior de la casa, evitando que los roedores encuentren un hueco para meterse en la casa.El clavo y la canela también tienen propiedades que permiten ahuyentar a los ratones, pero no son efectivos. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Usar mallas de acero, puesto que es el único material que las ratas y ratones no pueden roer para hacer agujeros que los dejan entrar a los hogares. Un buen método de prevención es rellenar cualquier agujero de la casa con malla de acero. Esto puede ser desde agujeros en los conductos de ventilación a huecos en los armarios de la cocina.