Había temperaturas de más de 32 grados. El hombre fue arrestado por su descuido fatal.
Hay conmoción entre los pobladores de Port St. Lucie, ciudad ubicada en la costa atlántica de Florida (EE.UU.), tras la muerte de un niño de apenas dos años este lunes pasado. Según las autoridades, su fallecimiento se debe a un golpe de calor tras haber permanecido «durante horas» en un carro.
El mismo día su padre fue arrestado pues, presuntamente, olvidó al menor en el vehículo. El Departamento de Niños y Familias de Florida también fue notificado.
Según la Policía, James Fidele, de 37 años, llamó a los servicios de emergencia tras darse cuenta al cabo de varias horas y cuando los rescatistas llegaron al lugar comenzaron las labores de reanimación antes de transportar al niño a un hospital, donde murió más tarde.
“Le dijo a la policía que se olvidó de sacar a su hijo del vehículo cuando llegó a casa esta mañana”, narra el medio estadounidense CBS 12. A la 1:17 p.m. ellos fueron notificados.
“Este es un incidente muy desafortunado y trágico. Nuestros pensamientos y oraciones están con la familia de la víctima durante este momento difícil”, dijo el sargento John Dellacroce, portavoz de la policía local, en un comunicado difundido por WPBF.
Florida atraviesa por una fuerte ola de calor y el día de la tragedia los termómetros marcaron los 32,7 grados centígrados. Según el Consejo Nacional de Seguridad (NSC) de Estados Unidos, un promedio de 38 niños mueren cada año tras ser olvidados en vehículos a altas temperaturas.
La razón, según los expertos, es que el cuerpo de un niño se calienta de tres a cinco veces más rápido que el de un adulto.
